“Registro formal” o “informal”: qué son y cómo diferenciarlos mediante ejemplos

  • Lenguaje o registro formal: se emplea en contextos de mayor formalidad, alejados de un entorno familiar o íntimo. Situaciones de respeto, protocolares o en las que se exige cierta intelectualidad. Son ejemplos en los que se emplea un registro formal: un correo electrónico entre un empresario y un cliente o entre un alumno y un profesor, una tesis doctoral o un trabajo de fin de máster.
  • Lenguaje o registro informal: el lenguaje informal se emplea con personas con las que tenemos una relación cercana, como amigos, familiares o compañeros de trabajo. Se utiliza un lenguaje informal en correos electrónicos y mensajes entre compañeros de trabajo o amigos o que se producen fuera del ámbito académico o profesional, en publicaciones en redes sociales o blogs y en mensajes enviados mediante servicios de mensajería instantánea.


Qué tipo de lenguajes o registros existen

No nos comunicamos de la misma forma con todas las personas. De igual manera, la escritura varía considerablemente dependiendo de a quién va dirigido el texto que estamos escribiendo y dentro de qué contexto se produce. El contexto comunicativo en el que se sitúa el hablante o en el que se produce la comunicación escrita es el que define el tipo de registro o lenguaje que debemos emplear.

Antes de adentrarnos en cuál es el lenguaje formal y cuál el lenguaje informal y en cuándo debemos hacer uso de un registro más o menos formal, vamos a repasar brevemente los tres principales registros que existen.

Según la Didáctica de la Lengua y la literatura* cada hablante maneja dos o tres registros de la lengua: el registro familiar, el registro formal y el registro coloquial. Según Antonio Mendoza Fillola, autor de este libro, todos los hablantes de una lengua somos capaces de dominar al menos dos registros lingüísticos: el coloquial y el familiar.

1) El registro familiar: es el que se emplea con personas queridas o en la intimidad.

2) El registro coloquial: es el que se utiliza en contextos sociales informales y con personas conocidas.

3) El registro formal: es el que utilizamos cuando hablamos con desconocidos o con superiores o en contextos profesionales.

Cuando somos niños, empleamos solo el registro familiar porque es el único que hemos adquirido hasta ese momento. A esa edad nos dirigimos siempre a otros con total familiaridad, como lo hacemos con nuestros padres.

¡Pasar de un lenguaje “informal” a uno “formal” no es tan difícil!

Durante la adolescencia usamos un registro coloquial, aunque hablemos con adultos o profesores, ya que aún no hemos aprendido a hacer uso, en la mayoría de los casos, de un registro más formal. Poco a poco vamos aprendiendo este nuevo registro y diferenciando con quién debemos utilizar un lenguaje formal o un lenguaje informal.

Con la experiencia, el estudio y la especialización, vamos haciendo uso de otros registros más variados y específicos como el registro profesional o literario. Algunos de estos registros se solapan entre sí y comparten muchas de las características de, por ejemplo, el registro formal.

Hasta ahora se había hecho una distinción entre lenguaje formal escrito y lenguaje informal oral. El lenguaje escrito se ha considerado siempre un lenguaje formal, ya que, en teoría y hasta ahora, la lengua escrita se regía por un único código: un código estándar, formal y unitario que no permitía variedades dialectales ni coloquialismos.

No obstante, desde que existe Internet y empleamos a diario servicios de mensajería como WhatsApp, escribimos todo tipo de correos electrónicos o publicamos en las distintas redes sociales, el texto escrito ya no está asociado únicamente con el registro formal. Un buen ejemplo de ello son los correos electrónicos que intercambiamos con amigos y familiares o las publicaciones en Twitter.

La buena noticia es que hoy en día resulta muy sencillo escribir en un estilo formal o informal según la necesidad que tengamos. Si queremos pasar de un estilo informal a otro formal, solo tenemos que parafrasear el texto utilizando una herramienta de escritura como LanguageTool.


Diferencias entre el registro formal e informal

Como ya hemos adelantado, emplearemos un registro formal o informal de acuerdo con una serie de razones. El principal motivo que nos sirve para decantarnos por un lenguaje coloquial o por un lenguaje formal es la relación que existe entre los interlocutores y el contexto en el que dichos interlocutores se encuentran.

No es lo mismo escribir un correo electrónico a nuestro jefe con el que trabajamos diariamente, que a un profesor de universidad para solicitarle una revisión de examen o a nuestro mejor amigo para contarle qué tal han ido las vacaciones.

Por otro lado, cuando hablamos de lenguaje escrito, la tipología textual suele determinar también qué registro debemos emplear. Aunque, como hemos comentado anteriormente, hay tipologías textuales en las que se pueden emplear varios registros según el contexto.

Podemos escribir un email a un profesor con un registro formal o un email a un amigo con un registro coloquial. Sin embargo, nunca es correcto usar un registro informal si estamos redactando una querella o escribiendo una tesis doctoral.

Para usar correctamente el registro informal o formal, es importante tener en cuenta una serie de características y códigos lingüísticos que analizaremos a continuación, como el uso de usted o , la preferencia por las formas correctas de enunciación o el uso de abreviaturas o vulgarismos.

¿Y, entonces, cuándo debemos escribir utilizando un lenguaje formal y cuándo un lenguaje informal? Escribimos utilizando un lenguaje formal:

  • Cuando debemos tratar al interlocutor con respeto, como, por ejemplo, cuando redactamos un correo electrónico o un informe para un cliente con el que no tratamos o trabajamos con regularidad.
  • En actividades relacionadas con el ámbito académico, político o institucional. Por ejemplo, en una defensa de un proyecto en la universidad, en una solicitud de admisión a la universidad, en un CV, en el BOE o en cualquier otro documento oficial.
  • En los textos que redactamos para que se presenten en una recepción, asamblea, exposición o para que se lean como parte de una conferencia o liturgia.

Por otro lado, usamos un registro informal cuando escribimos:

  • Correos electrónicos o mensajes enviados mediante servicios de mensajería instantánea como WhatsApp y conocemos al destinatario o existe una relación de amistad o cercanía.
  • Correos electrónicos con compañeros de trabajo.
  • Publicaciones en redes sociales, blogs, páginas web de contenido divulgativo o de entretenimiento.
  • Guiones de programas de televisión, para videoclips, películas, etc.
  • Correos electrónicos con información específica que recibimos al registrarnos al boletín informativo de alguna marca o empresa.
  • Reclamos publicitarios en anuncios y en ciertos textos literarios.
Recuerda:

A la hora de escribir cualquier tipo de texto elegiremos entre un lenguaje informal o formal dependiendo del contexto, la relación entre el receptor y el destinatario de dicho texto, el tema y el motivo por el que se produce dicha comunicación escrita.


Qué es el registro o lenguaje formal

Analizados los aspectos básicos de la comunicación formal e informal y cuándo debemos usar un lenguaje más o menos formal al escribir, nos toca desgranar también todos los aspectos que caracterizan al lenguaje formal.

Escribimos usando un registro formal cuando queremos causar una buena impresión o cuando existe cierto protocolo relacionado con ese tipo de textos (como en el BOE o Boletín Oficial del Estado). Debemos planificar los elementos que forman parte del lenguaje formal y escribir de manera correcta, sin errores o faltas de ortografía y de manera más educada o cultivada.

Nuestro consejo:

Si tienes que escribir un proyecto de fin de máster, una tesis doctoral o cualquier otro documento oficial, es esencial que no incluyas ninguna falta de ortografía o gramatical y que utilices un estilo formal adecuado al contexto. Para evitar caer en errores ortográficos innecesarios, no te olvides de usar el asistente de escritura multilingüe y gratuito LanguageTool.

Características del “registro formal”: cuándo debemos emplearlo.

Características del lenguaje formal

Estas son las principales características del registro o lenguaje formal:

1) Respeta de manera estricta las reglas ortográficas y gramaticales.

2) Se debe emplear siempre que estemos dentro de un contexto laboral, gubernamental, diplomático o académico y siempre que se necesite marcar distancia con el interlocutor.

3) Se deben usar sinónimos para que nuestro vocabulario no resulte demasiado repetitivo.

4) Se deben evitar las redundancias o repeticiones.

5) Los textos escritos con un lenguaje formal suelen contener un léxico variado y más culto o elevado.

6) No se deben utilizar vulgarismos, modismos ni muletillas. Tampoco suelen emplearse demasiados extranjerismos o anglicismos y se recomienda usar la voz española siempre que sea posible.

7) Las oraciones deben ser completas y seguir una forma sintáctica apropiada.

8) Las oraciones suelen ser más largas y tener una estructura más compleja que en el registro informal.

9) Si se trata de un texto completo, se debe estructurar la información de manera coherente y adecuada a la tipología textual.

10) No deben emplearse abreviaturas, contracciones o jergas.

11) Se prefiere la forma usted cuando nos referimos al receptor en vez de o vos.

12) Se suelen emplear fórmulas de cortesía (como “excelentísimo”) y el trato entre los interlocutores debe ser respetuoso.

13) Utiliza un léxico especializado (por ejemplo “remuneración” en lugar de “paga”).

14) Utiliza cultismos (por ejemplo, “adversidad” en lugar de “problema”).

15) Evita las groserías o palabrotas.

16) Conviene emplear la voz pasiva y no solo la activa.

17) Reprime las emociones y los sentimientos. Se suelen emplear recursos retóricos para expresar nuestra opinión o crear un discurso.

¿Cuándo debemos usar un “registro formal”? Ejemplos y características.

Ejemplos de lenguaje formal

La manera más sencilla de comprender qué textos pertenecen al lenguaje formal es mediante ejemplos. Gracias a estos ejemplos de oraciones o párrafos escritos usando un lenguaje formal, sabrás diferenciar cuándo utilizar un registro coloquial o uno formal y apreciar y distinguir las características y elementos que constituyen el registro formal.

Estimado Doctor [Nombre completo]:

Me dirijo a usted para invitarle a la graduación del curso 2021/2022 de la Facultad de Medicina de Granada. Esperamos su confirmación antes del evento.

Saludos cordiales,

[Nombre completo]
Por medio de la presente, se le informa de que debe asistir a la Comisaría de Policía del Prat el 23/01/2022.
Estimada [Nombre]:

Le escribo para saber cómo se siente e interesarme por su estado de salud.

Espero que se recupere pronto.

Le envío un cariñoso saludo,

[Nombre completo]
Si le interesa este puesto de trabajo y cumple con todos los requisitos y cualificaciones necesarias, no dude en enviar su CV y carta de presentación mediante correo electrónico al departamento de Recursos Humanos de la empresa [Nombre de la empresa].
Le remito mi más sentido pésame.
Muchas gracias por enviarnos su CV. Le confirmamos acuse de recibo y contactaremos con usted a la mayor brevedad posible.
Estimados compañeros:

Por el presente les comunico que he decidido abandonar la compañía para embarcarme en una nueva aventura profesional.

Ha sido un placer poder trabajar en este proyecto.
Les envío un cordial saludo y espero que podamos volver a colaborar en un futuro.

[Nombre completo]
Resumamos:

El registro o lenguaje formal:

  • Sigue de manera estricta las reglas ortográficas y gramaticales.
  • No acepta diminutivos, abreviaturas o coloquialismos.
  • Evita los modismos, los vulgarismos o las muletillas.
  • Prefiere la forma usted a .
  • Consiste en oraciones más largas y complejas.


Qué es el registro o lenguaje informal

Al contrario que ocurre con el registro formal, el registro coloquial o informal debe emplearse si entre los interlocutores existe una relación de confianza. Esto puede suceder de manera oral en conversaciones entre amigos, familiares o compañeros de trabajo y, de manera escrita, en correos electrónicos con amigos, mensajes de WhatsApp o Slack, anuncios en una revista o en publicaciones en Twitter o Instagram.


Características del lenguaje informal

El lenguaje informal usa un vocabulario más coloquial, se produce de manera espontánea, no debe ser demasiado elaborado y emplea un léxico más cariñoso y cálido. Las principales características del lenguaje informal son:

1) No se le da tanta importancia a la corrección del lenguaje y se permiten ciertas incorrecciones. Sin embargo, nunca da buena impresión cometer faltas ortográficas, ¡así que no te relajes demasiado!

2) Se admiten los juegos de palabras, los dobles sentidos, las bromas o las groserías.

3) Se pueden emplear diminutivos y apodos.

4) En la mayoría de los casos se prefiere la forma en lugar de usted.

5) Se admiten construcciones irregulares.

6) El discurso es espontáneo y da lugar a repeticiones e interrupciones.

7) Se pueden emplear vulgarismos, modismos y muletillas (como bueno, vale, etc.). Abunda el argot y la jerga.

8) El lenguaje informal permite que expresemos nuestras emociones mediante interjecciones y onomatopeyas.

9) Existe cierto grado de complicidad entre el emisor y el receptor del mensaje y esto se refleja en aquello que escribimos.

10) No se suelen utilizar oraciones pasivas, sino que la acción se expresa mediante construcciones en voz activa.

11) El tono es más directo y las frases son más cortas y sencillas.

12) Se puede usar la ambigüedad.

13) Se emplean frases hechas, exageraciones y expresiones coloquiales o localismos.

14) Abundan las oraciones inacabadas y las frases exclamativas e interrogativas.

15) El vocabulario suele ser más básico o pobre que en el registro formal.

16) Se pueden omitir palabras (fenómeno lingüístico que se conoce como elipsis) y no resulta incorrecto emplear palabras genéricas (como cosa, algo, esto, eso, etc.)

¿Cuáles son las características que determinan el “registro informal”?

Ejemplos de lenguaje informal

Te mostramos algunas oraciones o textos que son propios del lenguaje informal.

Vamos a cenar, ¿te vienes o qué?
Cuando pases luego por casa, acuérdate de traerme eso, porfi.
Hola, Luis:

¿Qué pasa? ¿Que ya no te acuerdas de mí o qué?
Anda, cuéntame algo y dime cómo te va por ahí.

Un abrazo y ¡nos vemos prontito!

[Nombre]
Tía, si no me contestas a este mensaje, ¡te mato!
Quería decirte que me encantó tu actuación en el Primavera Sound. ¡Aún se me ponen los pelos de punta! Ojalá leas mi mensaje y sepas que soy tu fan número 1.
Bueno Pues allá va mi mensaje. Solo quería que supieras ¡Que te echo un montón de menos y que tqm!
Hola, [Nombre]:
Gracias por aceptar nuestra oferta. ¡Bienvenido a [Nombre de la empresa]!

¡Hoy es el primer día del resto de tu vida (profesional)! Estamos muy contentos de que quieras trabajar con nosotros y estamos deseando que te unas a nuestra pequeña comunidad.

¡Te prometemos que no te arrepentirás!

Un saludo,

[Nombre]
Resumamos:

El registro o lenguaje informal:

  • No tiene tan en cuenta la corrección de la lengua.
  • Utiliza un estilo directo y rápido con frases más cortas.
  • Hace uso de barbarismos, argot, jerga, muletillas, juegos de palabras y vulgarismos.
  • Se trata de una escritura más espontánea y menos planificada.
  • Prefiere la forma o vos a usted.
  • Tiene carácter coloquial y es más expresivo.

Lenguaje formal Lenguaje informal
Evita usar abreviaturas, jergas o contracciones. Se permiten las abreviaturas, jergas o contracciones.
Se prefiere el uso de “usted”. Se prefiere el uso de “tú”.
Planificación, elección y uso de los recursos lingüísticos adecuados. Falta de planificación del discurso.
Oraciones largas y de un estilo más elaborado y pulido. Se prefieren las oraciones cortas y simples.
Evita los barbarismos, vulgarismos y las groserías. Se permiten los barbarismos, vulgarismos y las groserías
Evita las abreviaturas, los giros coloquiales y las interrupciones. Se permiten las abreviaturas, giros coloquiales y las interrupciones.
Debes cumplir con las normas gramaticales y ortográficas. Existe más flexibilidad en lo que respecta a la ortografía y las normas gramaticales.

Referencias:

* Mendoza Fillola, Antonio (2006). Didáctica de la lengua y la literatura. PEARSON EDUCACIÓN. https://books.google.es/books?id=-uIcdQEQnUoC